Es el aire que me envuelve
y que me asfixia
trayéndome el perfume
a jazmín
que tu cuerpo exhala.
No puedo hacer nada,
tan solo dejarme vencer.
Ni quiero
ni es mi deseo
combatir
sabiendo que esta batalla
está perdida,
tan solo dejarme mecer
entre las ramas de tu jardín.
No puedo alzar las manos
y acariciar el fruto.
No, no es que esté prohibido,
son mis brazos
ya muertos
de tanto esfuerzo
sin poder alcanzarlo.
Y aún así,
me envuelve el olor a jazmín
de tu cuerpo desnudo.
.....ooOoo.....