Como grano de arena
en la palma de mi mano,
aquello corría y corría
sin detener su carrera.
Agradable era al tacto
y me hacía cosquillas.
Curaba mis heridas.
Yo intentaba detenerlo
saber de él, conocerlo,
mas cuanto más lo pretendía,
él más corría y se escondía
entre los pliegues de mi mano.
La abrí entonces todo lo que pude
para ver si lo veía.
Estirada mi piel, ya sin arrugas,
(pareciera tener la tensión del arco de Ulises
segundos antes de salir la flecha disparada),
aquel diminuto hallazgo
rodó hasta caer al suelo.
Apenas un segundo antes,
aunque escondido y sin verlo,
yo lo tenía.
Sentía su presencia.
Ahora,
ni lo veo
ni lo tengo,
y lo que es peor: Ni lo siento a mi lado.
en la palma de mi mano,
aquello corría y corría
sin detener su carrera.
Agradable era al tacto
y me hacía cosquillas.
Curaba mis heridas.
Yo intentaba detenerlo
saber de él, conocerlo,
mas cuanto más lo pretendía,
él más corría y se escondía
entre los pliegues de mi mano.
La abrí entonces todo lo que pude
para ver si lo veía.
Estirada mi piel, ya sin arrugas,
(pareciera tener la tensión del arco de Ulises
segundos antes de salir la flecha disparada),
aquel diminuto hallazgo
rodó hasta caer al suelo.
Apenas un segundo antes,
aunque escondido y sin verlo,
yo lo tenía.
Sentía su presencia.
Ahora,
ni lo veo
ni lo tengo,
y lo que es peor: Ni lo siento a mi lado.
Y desapareció de mi lado,
sin poder apreciar
siquiera sus formas.
.....ooOoo.....
.....ooOoo.....
¡¡Hola Guilleeeeeee!! Aquí estoy finalmente :)
ResponderEliminar"Aquello", aunque no lo veas y aunque no lo sientas, siempre te está esperando, sólo espera que lo descubras nuevamente para hacerte cosquillas, no en la mano sino en el corazón.
A pesar de la velada nostalgia, tu poema es bellísimo.
Un besote gigante, querido amigo.
Las heridas se curan, no siempre perduran, y el cariño de los demás, ayudan mucho a curar esas heridas.
ResponderEliminarUn abrazo, Guiller.
Guillermo, si lo has sentido por un momento, es que se acerca cada vez más, sé que muy pronto se prendera en tu mano para siempre.
ResponderEliminarUn beso muy grande.
Besicos
Ay,señor! Pero pa qué lo sueltas, chiquillo?
ResponderEliminarEsas cosas se amarran bien fuerte, aunque no sepas cómo son. Simplemente, por cómo te hacen sentir.
:)
Muchos besos-besicos!!
Hola Guillermo: Cuando algo te hace cosquillas en alguna parte hay que asegurarla y no dejarla escapar pues las cosquillas suelen ser muy agradables.
ResponderEliminarEstoy en plena convalecencia y no me dejan casi tiempo asi que un fuerte abrazo
Liliana
ResponderEliminarMaría
Ashia
Lourdes
JuanE
Mil Gracias por vuestro apoyo, pero es que hay "nubarrones por el horizonte".
Besibrazos.
!Guille, que el poema ma dejao un pellizquillo de nostalgia tristona... con lo contenta que estaba yo después de leerte en mi blog... hombre Guillermo, qué caramba, ni un pasito pa trás ni pa coger impulso...
ResponderEliminarAunque eso sí, las cosas como son, el poema no es que sea un poema, es un poemazo de la leche: preciosisimo, creeme, magnifico... buenísimo. Un pedazo de poema genial.
Mil besitos mu gordotes y mu sonoros.
Apm... Bueno, precisamente este es un poema... diríamos... que podría entrar en una categoría intermedia entre "oscuro" y de "desamor" (desamores oscuros)... Pero como está creado en este periodo actual en el que me encuentro, pues lo he catalogado como de los de "Opaca Lucidez"
ResponderEliminarGracias por tus palabras.
Besicos... de los besicos gordos :)
es un poema precioso Guiller, y aunque de momento no veas ni sientas ese pequeño grano de arena, volverá, sin duda alguna volverá.
ResponderEliminarbiquiños.
Aldi... He tenido golondrimas estos dos veranos pasados en la casa de la playa... Éste último verano aparecieron un par de días y se marcharon sin volver. Rompí su nido de barro para que ningún insecto o ser volador o rastrero pudiera habitarlo.
ResponderEliminarGracias... Besicos
he vuelto a releer el poema y lo encuentro más triste que la primera vez, tal vez porque ahora leo el comentario de las golondrinas; recuerdo cuando me escribiste de esos nidos.
ResponderEliminarbiquiños,
Guille, que sí..., lo que pasa es que ahora lo tienes corriendo por el ombliguito... búscalo bien...
ResponderEliminar:)
Aldi
ResponderEliminarAntonia
Muchos Besicos y Gracias por vuestro comentario
El tiempo, ni se compra, ni se vende... y a veces ni se puede compartir.
ResponderEliminarAbrazos
AdR... Un placer tenerte por aquí.
ResponderEliminarGracias por tu tiempo.
Un Abrazo.
¿El bálsamo de fierabás?
ResponderEliminarBesos
ResponderEliminarMyr... Bueno, ya te contesté, no???
ResponderEliminarBesicos