
Cántame nuestras canciones de hoy
porque el ayer,
ni existió,
y el mañana está por llegar.
Recítame tus miradas;
escríbeme en la arena, niña,
los versos de tus andares
al compás del contoneo
que bailan tus caderas;
dibújame, en mis ojos,
tu sonrisa encantadora
de Gioconda enamorada,
cuando a nuestra pasión
se abren, de par en par,
las puertas del cielo.
Y sigue cincelando, mi Vida,
mi vida,
porque al crisol
de las caricias
de tus pequeñas manos,
en cálido amor conviertes
el duro metal
de mis días pasados.
…..ooOoo…..
Me ha encantado este poema, todos me gustan y no siempre comento... Pero hoy no me he podido resistir.
ResponderEliminarUn abrazo y un beso...
Te mando Besicos y abracicos
ResponderEliminaraxuxaos. Gracias