No Pretendo Amarte Porque Sí

Quisieron apagar sus luces las estrellas,
los mares, parar el vaivén de las olas,
la Tierra, frenar su carrera
y aquel reloj de cristal
cerrar el paso de sus segundos
y matar su arena.


No, esa no es la manera
de vivir el día a día
en esta vida que, unas veces nos llena
y otras nos vacía como momias
y en sarcófagos nos encierra
sin dejarnos ver más allá
de las fronteras.


Yo, Amor,
Te Amo en verdes praderas,
en inmensos bosques verdes,
en grandes lagos de adelfas.
Te Amo en cielos infinitos
de azules resplandecientes,
en los rayos cálidos del sol naciente.
Te Amo como el inmenso mar bravo
o como el huracán que hace temblar
y vuela los hogares de las pobres gentes.
Te Amo inmensamente
desde la sima más profunda de esta Tierra
hasta más allá de universo infinito.


Pero Mi Amor....


También Te Amaría en inmensos territorios
de estepas secas,
en las ardientes sabanas,
en las sedientas arenas de los desiertos,
Te Amaría en las ascuas de la fragua,
en la desnudez de los fríos hielos,
en los tremendos relámpagos del cielo,
en la tenebrosa luz ciega de la noche negra,
en el paredón del fusilado,
en la enfermedad y en el llanto...
como sabes ciertamente que Te Amo,
y te seguiré Amando.


Y es que,
¿cómo no voy a Quererte y Amarte,
mi Alma Bella?
Bella, con alma encantadora,
Mi Preciosa Estrella.


Bella, entre las bellas Bella,
Cariñosa, Mimosa y Linda Soñadora.


Encantadora, sí,
de mis pasiones por tí,
porque encantado me dejaste
con tus Cariños y Amores
que, a poquito a poco,
fuiste plantando la simiente
y regaste, despacito... muy despacito,
para que mi corazón se marchara contigo.


Y allí contigo lo tienes,
también encantado y feliz
porque siente el Mimo Enamorado
que tú le tienes,
con que tú lo cuidas.
Y él, encantado de la vida
por disfrutar ese placer
que le alimenta para seguir latiendo
día a día.
Sí, en tus manos,
en tus primorosas manos
de olor canela y violetas frescas.


Gracias, Mi Chiquitica Estrella,
Gracias por tu Belleza de Alma Buena,
de Corazón Tierno y sensible...
hacia este corazón que no quiere volver a mí.


Sí, y yo feliz porque tú lo tengas,
feliz, porque contigo él es feliz.
Feliz, porque sé cómo lo cuidas...
feliz, porque yo quiero hacerte feliz.


Y te Amo y mil veces te lo diré
aunque te canses de mí


Yo conozco y sé de mis sentimientos,
de cómo son las entrañas de mi corazón
cuando se trata de sentir Amor.
Yo sé de mis sentimientos,
de mis sentimientos por tí.


No pretendo amarte porque sí,
quiero Amarte, simplemente,
porque ahora que he empezado a saber
lo que significa Amarte en Toda Tú,
quiero sentir, más que en mí,
la capacidad de poder darte felicidad
y conseguir que así te sientas Feliz.
Feliz conmigo y que te abrace mi Amor,
te llegue y te cale hasta los huesos.
Que me sientas. quiero, como el secano
siente recibir la lluvia bendita
que cubre sus heridas resquebrajadas
provocadas por el inmisericorde sol.


Quiero que sientas mi amor
hasta más allá de tus entrañas,
hasta más allá de tu Corazón y tu Alma.


Quiero que me sientas a tu lado,
junto a tí, como tu romance
de amor enamorado.


Quiero, yo también,
tenerte a mi lado
como romántica enamorada
a quien pretendo seducir todos los días
de esta vida, a poquito a poco,
despacito, con cariños y con mimos,
con amores candentes,
con pasión, a veces medida
y otras veces desmedida.


Quiero que seamos los dos,
nuestra mutua bebida
del néctar de ambrosía
que enamore a nuestros corazones.


Y quiero,
en nuestras mañanas,
ser tu Amor en la suave brisa
que entra por nuestra ventana,
cuando la tenue luz del alba,
sigilosa, vergonzosa,
llega pasito a pasito,
para acariciar tu cuerpo
a nuestra alcoba.


Yo, Mi Estrella,
así quiero Quererte
y así Te Quiero, Amor.


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