Hablando De Ella

Tengo un amor,
que no es amor ni es nada,
nada que despreciar ni olvidar,
porque ella es mi Todo.


Ella es mi sol y mi noche,
mi agua clara,
mi mar donde navego,
mi luz en la mañana.


Ella disipa mis penas,
me arregla el alma,
me habla bonitas palabras,
y cuando mi Soledad me abraza,
Ella corriendo también me abraza
y la aplasta.


Ella es como la brisa y la tormenta,
como la paz y la guerra,
como el agüita fresca
que en mis días de secano
me riega y florece
las secas hojas de mi
alma en pena.


Si alguna vez dije "ella"
en alguno de mis poemas,
no se confunda nadie,
porque "ella" no es Ella.
Ella y solo Ella,
la única ella,
solo puede y podrá ser:
Ella.




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